La aportación andalusí

La aportación andalusí

 

Las innumerables aportaciones de Al-Andalus a la sociedad actual han conformado a lo largo de los siglos una parte esencial de la identidad de los pueblos que componen la península ibérica así como del Maghreb y  de las zonas de influencia de la cultura andalusí.

Se puede decir que las primeras ciudades renacentistas fueron andalusíes, que sin las aportaciones de Al-Andalus el Renacimiento Europeo no habría tenido lugar o habría sucedido con posterioridad y de manera diferente, ya que estas aportaciones no se ceñían sólo a las novedades y avances científicos, si no también a la recuperación de los avances obtenidos por las culturas grecorromanas  perdidas con la irrupción de la oscura Edad Media y que conformaron las bases renacentistas.

Aportaciones como las relativas a los diversos idiomas romances de la península ibérica son testimonio vivo de la heterogeneidad de la población y del bilingüismo entre el romance vernáculo y el árabe dialectal a lo largo de la historia de Al-Andalus. Una referencia más al crisol de identidades que eran parte esencial del carácter andalusí.

Reconocidas o no, por tanto, cada aportación de Al-Andalus va más allá de las fronteras andalusíes. Desde las tierras de frontera y las numerosas vías comerciales abiertas y frecuentadas, las diferentes diásporas andalusíes establecidas por toda la cuenca mediterránea, hasta las derivaciones de esas aportaciones en años posteriores, conquista de América incluida, conforman una visión global de la influencia andalusí  a lo largo de los siglos y hasta la actualidad.

Hoy día, con la perspectiva sobre los hechos, tanto positivos como negativos, que nos da la Historia, debemos buscar y encontrar en muchos de los ideales de la historia de Al-Andalus la principal aportación de todas, las respuestas a las incógnitas que la interculturalidad suscita en la aldea global, respuestas que se oponen al choque de civilizaciones teorizado por Huttington y abren un futuro en el que la interculturalidad, como elemento natural de las sociedades modernas, haga de la globalización una oportunidad de evolución sociológica, científica, artística…una evolución sobretodo humana y humanista para todos y todas.